Xbox ha dado el paso que muchos esperaban —pero pocos imaginaban con este grado de ambición—: se une a ASUS para lanzar una consola portátil con corazón de PC y espíritu de consola, lista para llegar estas Navidades de 2025. Su nombre oficial: ROG Xbox Ally, una fusión que lleva el gaming portátil a nuevas alturas y planta cara directamente a la Steam Deck, la Lenovo Legion Go S… y por qué no, incluso a la mismísima Nintendo Switch 2.
Game Pass, Steam y más: toda tu biblioteca en la palma de la mano
No se trata de un dispositivo más con Windows. La ROG Xbox Ally arranca con la app de Xbox desde el primer momento, ofreciendo una experiencia que mezcla la versatilidad de un portátil con la inmediatez de una consola. Es compatible con Game Pass para PC, pero también puedes lanzar tus juegos desde Steam, GOG, Epic Games Store y hasta hacer streaming de títulos de PS5 vía PS Remote Play. Todo bajo el capó de Windows y con la potencia de AMD.
Dos modelos, un objetivo: jugar a lo grande
ASUS pondrá en circulación dos variantes: una estándar y otra premium. El modelo base, en color blanco al estilo Xbox Series S, integra un procesador AMD Ryzen Z2A, 16 GB de RAM LPDDR5X-6400 y un SSD de 512 GB. El tope de gama, la Xbox Ally X, llega en negro con un Ryzen AI Z2 Extreme, 24 GB de RAM LPDDR5X-8000 y un SSD de 1 TB. Sí, esa RAM no solo es mayor, también es más rápida. Aquí no hay margen para cuellos de botella innecesarios.
Diseño que respira Xbox por cada esquina
A simple vista, la ROG Ally con sello Xbox se desmarca del diseño original de ASUS para acercarse más al ADN de consola. Adiós a los bordes redondeados tipo Switch: esta portátil adopta agarres ergonómicos inspirados directamente en el mando de Xbox, lo que se traduce en comodidad total para sesiones largas. Y no solo es apariencia: el botón Xbox está presente, junto con la cruceta de ocho direcciones, botones con la paleta clásica de colores, joysticks de tamaño completo con anillos LED personalizables y hasta gatillos de impulso en la versión X.
El sistema incluye tecnología háptica HD, controles de movimiento de 6 ejes, botones traseros reasignables y accesos directos a funciones clave como el menú, la biblioteca, el centro de control y más. Esto no es un simple portátil gamer con forma de mando: es un sistema pensado para los que vivimos con el stick en la mano.
Pantalla, batería y conectividad: sin compromisos
Ambas versiones montan una pantalla Full HD de 7 pulgadas a 120 Hz con soporte para AMD FreeSync. La visibilidad también ha sido una prioridad: el Gorilla Glass Victus con recubrimiento DXC reduce reflejos y mejora la lectura en exteriores o con luz ambiental cambiante.
En cuanto a batería, la Xbox Ally X sube hasta los 80 Wh, frente a los 60 Wh del modelo base. Esa diferencia de capacidad también se refleja en el peso: 715 gramos contra 670, sin variar el tamaño. Pero ambos comparten un cargador rápido de 65 W, y sí, puedes ampliar almacenamiento vía microSD UHS-II o incluso cambiar el SSD por un M.2 2280.
¿Conectividad? Tienes de todo: Wi-Fi 6E, Bluetooth 5.4, USB-C con DisplayPort en ambos modelos, y además Thunderbolt 4 en el modelo X. Nada se queda fuera.
Más que una portátil, una consola de nueva generación con alma de PC
Con esta jugada, Xbox apunta no solo al público que ama el ecosistema de Microsoft, sino a cualquiera que disfrute del gaming en PC y quiera llevárselo consigo sin sacrificar rendimiento ni comodidad. El hecho de que puedas jugar nativamente a todo Game Pass para PC, hacer streaming en la nube, o conectarte por juego remoto desde tu Series X|S, convierte a la ROG Xbox Ally en una bestia versátil que no se casa con una sola plataforma.
Y si lo piensas bien, este dispositivo es también una declaración de intenciones: Microsoft quiere convertir a Windows en la nueva plataforma portátil por excelencia, un terreno que hasta ahora parecía dominado por Valve y Nintendo.
Opinión del fan: ¿la definitiva? Puede ser…
Como amante de los setups con LEDs, de los joysticks con efecto Hall, y de los lanzamientos que hacen temblar la industria, hay algo muy claro: esta ROG Xbox Ally es probablemente lo más cercano que hemos estado de una Xbox portátil real. No es un accesorio, no es un experimento. Es una consola hecha y derecha, lista para jugar, modificar y conectar.
La Navidad de 2025 tiene un nuevo protagonista. Ahora solo falta una pregunta por responder: ¿cuánto costará? Porque si el precio acompaña, podríamos estar ante el dispositivo más deseado del año.
