Lo que debía ser una sesión épica de Battlefield 6 terminó convirtiéndose en una pesadilla para un gamer en Taiwán. El 10 de agosto, durante la beta pública, su ZOTAC GeForce RTX 5090 pasó de mostrar explosiones virtuales a protagonizar una muy real… dentro de su PC.
Según el jugador, todo comenzó con un congelamiento repentino de la imagen. Después llegaron las llamas y un inconfundible olor a plástico quemado desde la zona donde la GPU se acopla a la placa base. El fuego duró unos diez segundos, dejando la tarjeta chamuscada, afectando a componentes cercanos y oscureciendo parte de los tubos de refrigeración líquida.
El equipo, comprado como sistema preensamblado, ya está en manos del servicio técnico. El fabricante investiga el origen del problema. Las fotos filtradas muestran que el punto crítico estuvo junto a la ranura PCIe. Esto descarta, al menos por ahora, que se trate de los fallos de conector que marcaron la polémica de la RTX 4090. Todo apunta más a un fallo interno o a un cortocircuito aislado.
Los incendios en GPUs modernas son casos extremadamente raros. Sin embargo, no son inéditos. La historia reciente nos recuerda cómo la RTX 4090 protagonizó titulares en 2022 y 2023 por la fusión de sus conectores de 16 pines. Aquel problema se atribuyó tanto al diseño original como a inserciones defectuosas. Hasta este incidente, la RTX 5090 había mantenido un historial impecable, sin reportes masivos de fallos críticos.





Las ZOTAC RTX 5090 incluyen una “luz de seguridad” para alertar de problemas de conexión. Este detalle refuerza la teoría de que no fue un error del cableado, sino una avería puntual del hardware.
Por ahora, este incidente queda como una anécdota aislada. Sin embargo, no deja de recordarnos que, con potencias y consumos cada vez más altos, nuestras queridas GPUs son pequeñas bestias que merecen respeto. Y aunque esta vez el battlefield estuvo dentro del gabinete, esperemos que siga siendo la excepción y no la norma.