Hace apenas unos días, la conversación alrededor de Intel Panther Lake sonaba prometedora. Sin embargo, las últimas filtraciones han enfriado el entusiasmo y empiezan a circular comentarios poco amables: algunos fabricantes ya lo llaman, en tono de burla, “Pathetic Lake”. No es un apodo menor, sobre todo cuando hablamos del único terreno donde Intel todavía mantiene su reinado: los portátiles.
Un panorama complicado para el “equipo azul”
Mientras AMD sigue empujando fuerte con productos que enamoran tanto a gamers como a profesionales, Intel mantiene el tipo en laptops, su último bastión sólido. El problema es que Panther Lake no parece el salto disruptivo que muchos esperaban. En CPU, se plantea más como un “ajuste de cuentas” tras Arrow Lake que como una revolución; su carta más llamativa estaría en el apartado gráfico con Celestial (GPU Arc), pero incluso ahí la expectativa supera a la realidad filtrada.
Lo que dicen los insiders
El filtrador más confiable del sector, que ya acertó al anticipar lo que pasó con Meteor Lake y el decepcionante desempeño de Arrow Lake, asegura que lo que escucha sobre Panther Lake no es alentador. Según él, el chip apenas ofrecería un 10% de mejora en IPC y un híbrido entre lo bueno de Lunar Lake y lo correcto de Arrow Lake. Eso no suena mal, pero la competencia no espera: AMD Gorgon Point (Zen 5 Refresh) podría estar a la altura sin sudar demasiado.
Menos costos, más flexibilidad
Si algo juega a favor de Panther Lake es la vuelta a la flexibilidad de memoria. A diferencia de Lunar Lake, que apostaba por una integración costosa tipo “Apple”, los OEM podrán elegir entre LPDDR5X o DDR5 estándar, ajustando precios y configuraciones según el segmento. Además, se espera que Intel haya solucionado las típicas trabas de latencia y buses, ofreciendo un diseño más maduro y estable. No es la revolución soñada, pero sí un camino más sólido para preparar el terreno hacia Nova Lake.
Intel 18A, ¿la verdadera preocupación?
El gran elefante en la sala no es Panther Lake, sino el nodo Intel 18A. Oficialmente se presenta como una tecnología superior a TSMC N2, pero los rumores pintan otro escenario: dificultades para escalar producción y costos elevados que podrían limitarlo a chips pequeños y de gama baja. Si esto se confirma, Intel estaría cediendo terreno justo cuando más necesita mostrar músculo frente a TSMC.
