ASUS acaba de presentar un verdadero monstruo del suministro eléctrico. Se trata de su nueva línea Pro WS Platinum, una serie de fuentes de alimentación que no se anda con rodeos: hasta 3000 vatios de potencia bruta, pensados para estaciones de trabajo que operan al límite… o para quienes sueñan con montar el setup más bestia jamás visto.
Esta no es una fuente para el gamer promedio ni para el entusiasta con una sola RTX en su torre. ASUS va más allá y apunta al territorio donde habitan los creativos profesionales, diseñadores 3D, ingenieros de IA y, por qué no decirlo, algún que otro entusiasta con alma de overclocker. La joya de la corona es el modelo de 3000W, capaz —agárrate— de alimentar cuatro tarjetas gráficas RTX 5090 al mismo tiempo. Y no estamos hablando de GPUs de gama media: estas son las futuras reinas del rendimiento gráfico, tanto en gaming como en aplicaciones profesionales.
Nuevos conectores, nueva filosofía: menos riesgo, más precisión
Una de las grandes preocupaciones con las últimas generaciones de GPUs de NVIDIA ha sido el polémico conector 12VHPWR, responsable de más de un susto en sistemas de alto voltaje. ASUS lo sabe, y por eso ha rediseñado la experiencia desde el cableado. Inspirándose en la solución de MSI con conectores de color amarillo, ASUS apuesta por un toque más atrevido: puntas bicolor en tonos púrpura, no solo para mejorar la estética, sino para hacer más evidente una conexión segura.
No se trata solo de colores. Los conectores incluyen un baño de oro sobre los contactos de cobre, una mejora que, según ASUS, puede reducir la temperatura hasta 10 grados en condiciones de carga intensa. Aunque los detalles técnicos no son públicos, el objetivo está claro: evitar puntos de calor que puedan comprometer el rendimiento… o directamente fundir el cable.
Cables flexibles, refrigeración pasiva y diseño pensado para el futuro
Otro detalle interesante está en el propio diseño de los cables, que ahora tienen un grabado especial para ganar flexibilidad. Esto, en setups con muchas GPUs y poco espacio, es más que bienvenido. ASUS afirma que con una buena gestión del cableado, estos nuevos cables pueden trabajar hasta 50 °C más fríos que los convencionales. Eso sí, aunque en sus demostraciones se ve cómo los cables se doblan con facilidad, no es recomendable hacerlo durante el uso real.
A nivel de contexto, estamos viendo una nueva generación de componentes que no solo busca rendimiento descomunal, sino también robustez, seguridad y eficiencia térmica. La combinación de gráficas como las RTX 5090 o las RTX Pro Blackwell, junto con fuentes de este calibre, abre la puerta a estaciones de trabajo híbridas: gaming extremo y productividad profesional en un solo monstruo.
