El mercado de las consolas portátiles no deja de sorprendernos, y esta vez llega una propuesta tan llamativa como polémica: la Abxylute 3D One. Un dispositivo que mezcla consola, tablet y portátil en un mismo cuerpo, con un diseño que recuerda a una Steam Deck XXL, pero con un hardware que apunta a lo más alto gracias a un Intel Core Ultra 258V y gráficos integrados Intel Arc 140V.
Un 3 en 1 que mezcla consola, tablet y portátil

La gran carta de presentación de este equipo es su versatilidad híbrida: los controles se pueden retirar como si fueran unos Joy-Con, convirtiéndolo en una tablet Windows 11. Y si además se conecta la funda con teclado incluido, la Abxylute se transforma en un portátil completo. En pocas palabras, es un dispositivo diseñado para gamers que buscan un “todo en uno” sin renunciar al ecosistema de PC.
Pantalla 3D sin gafas y potencia Intel de nueva generación
Su pantalla tampoco se queda atrás: un panel IPS de 10,95 pulgadas Quad HD+ a 120 Hz que incluye un modo 3D estereoscópico sin gafas, con seguimiento ocular integrado. De entrada, más de 50 juegos de Steam están optimizados para este modo, y además se incluye software para transformar fotos y vídeos a 3D.
Bajo el capó, encontramos el mismo chip que da vida a la MSI Claw 8 AI+, el Intel Core Ultra 258V. Una CPU de 8 núcleos acompañada de los gráficos Arc 140V que, según las pruebas, rinden hasta un 30% más rápido que la APU Ryzen Z1 Extreme usada en la ASUS ROG Ally. La configuración se completa con 32 GB de RAM LPDDR5X y un SSD PCIe 4.0 de 1 TB, lo que la coloca cara a cara con futuros rivales como el Ryzen Z2 Extreme.
Luces, mandos desmontables… y un precio elevado

En cuanto a diseño, la Abxylute 3D One apuesta por joysticks con efecto Hall, trackpads al estilo Steam Deck, gatillos sensibles y RGB integrado. Los mandos se pueden acoplar a un soporte para usarlos como control inalámbrico, y el teclado desmontable refuerza su carácter “multidispositivo”.
Sin embargo, no todo son halagos: su batería de 50 Wh se siente insuficiente comparada con los 80 Wh de otras consolas como la ROG Ally o la MSI Claw. Además, el equipo pesa 1,1 kg, lo que obliga a incluir un soporte integrado para apoyar el dispositivo en la mesa durante sesiones largas.
Y lo que probablemente dolerá más a los jugadores: su precio. La Abxylute 3D One saldrá en octubre por 1.699 dólares, una cifra que la coloca en territorio de portátiles gaming de gama alta.