Intel empieza a cerrar el libro de su primera gran aventura en el mundo de las GPU gaming dedicadas. A través de una nueva Notificación de Cambio de Producto (PCN), la compañía ha confirmado que la Arc A750 Edición Limitada dejará de estar disponible a partir del 27 de junio, marcando oficialmente el inicio del fin para este modelo concreto.
La despedida de una pionera… con matices
Eso sí, no hay que entrar en pánico: la GPU Arc A750 como tal no desaparece, al menos no por ahora. Lo que Intel está retirando del mercado es su versión de diseño de referencia, la llamada “Edición Limitada”, una tarjeta que durante un tiempo buscó competir cara a cara con opciones de gama media de NVIDIA y AMD. Fue una declaración de intenciones con sabor a experimento: un primer paso de Intel para dejar claro que también quería formar parte del juego.
¿Qué modelos están afectados y qué sigue en pie?
Además de la Arc A750 Edición Limitada, también está programado el retiro de otra variante para el 30 de junio, así como de ciertos modelos de la serie Alchemist para portátiles. En cambio, el modelo Arc A580 y las tarjetas personalizadas por terceros (los famosos AIBs) no están afectados por esta decisión. Dicho de otra forma: Intel se aparta del frente, pero no abandona la batalla.
Y es que, al no tratarse de procesadores o CPUs como tal —productos que Intel controla casi por completo—, estas tarjetas gráficas aún pueden seguir vivas en manos de socios que decidan seguir fabricando y vendiendo sus propias versiones.
Un paso lógico en un camino que recién comienza
Aunque la palabra “descontinuación” suene a derrota, lo cierto es que esto era esperable. El ecosistema Arc sigue en evolución, y todo apunta a que Intel está despejando el camino para futuras generaciones, posiblemente bajo la arquitectura Battlemage, que promete competir de forma más agresiva tanto en rendimiento como en soporte de drivers. La Arc A750, pese a sus tropiezos iniciales, logró hacerse un hueco entre los entusiastas que valoran una propuesta diferente y con margen de mejora.
¿Vale la pena conseguir una antes de que se vaya?
Si alguna vez pensaste en probar algo fuera del duopolio NVIDIA-AMD, esta puede ser tu última oportunidad de hacerte con una GPU “made by Intel”. Su rendimiento ha mejorado con el tiempo gracias a los parches constantes, y si el precio acompaña, todavía puede ser una opción interesante para setups de gama media.
